La arquitectura industrial es un término paraguas utilizado para describir los edificios construidos para facilitar las necesidades de la industria. La arquitectura industrial engloba una serie de tipos y estilos de edificios que mezclan funcionalidad y diseño y pueden encontrarse en todo el mundo industrializado. Siga leyendo para saber más sobre la arquitectura industrial.
Edificios con arquitectura industrial
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La arquitectura industrial se concibió en torno a los sistemas especializados, los procesos, los equipos y las consideraciones de seguridad de los trabajadores en la fabricación, el procesamiento, la generación de energía y otras actividades industriales. Un estilo arquitectónico industrial incluye:
- Fábricas
- Almacenes
- Fundiciones
- Acerías
- Torres de agua
- Silos de grano
- Destilerías
- Cervecerías
- Refinerías
- Centrales eléctricas
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Principales características de la arquitectura industrial
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La arquitectura industrial adopta muchas formas, pero algunas de sus características comunes son:
- Combinación de funcionalidad y diseño
- Planos amplios y abiertos
- Techos altos
- Uso de materiales en bruto como hormigón, ladrillo, metal
- Falta de ornamentación en la fachada del edificio
- Acabados deteriorados y desgastados por años de uso intensivo
- Ladrillo visto, conductos y tuberías que de otro modo se alisarían en la construcción residencial
- Grandes ventanas de rejilla metálica
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La historia de la arquitectura industrial
Cuando hacemos referencia a la arquitectura industrial, nos referimos sobre todo a los edificios que surgieron durante la Segunda Revolución Industrial de finales del siglo XIX y principios del XX. Se construyeron como respuesta al uso generalizado de nuevos materiales como el metal y el hormigón, así como a los métodos de producción en masa desarrollados en este periodo.
Este nuevo estilo de arquitectura se construyó en torno a las necesidades de las industrias dedicadas a transformar las materias primas en productos acabados de la forma más eficiente posible. Los constructores y arquitectos se vieron obligados a tener en cuenta los procesos de producción y los flujos de trabajo individuales, así como las preocupaciones por la seguridad de los trabajadores.
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La tendencia de convertir antiguos almacenes en lofts para artistas comenzó en el bajo Manhattan en la década de 1960 y sigue cobrando fuerza en la actualidad. Muchos promotores han encontrado la manera de convertir edificios industriales en desuso en modernos apartamentos convertidos en lofts, espacios de trabajo conjunto, reconversiones de oficinas diáfanas y espacios para eventos. El reto de los arquitectos y diseñadores de interiores actuales es conseguir que el espacio en bruto, con sus grandes volúmenes, enormes ventanales y plantas diáfanas, se adapte a la forma en que trabajamos y vivimos hoy en día.
Las tecnologías en constante evolución y la robótica exigen a menudo que los edificios industriales existentes se modifiquen para adaptarse a las cambiantes necesidades de uso y que la nueva arquitectura industrial innove. Y mientras el mundo lucha contra una emergencia climática causada en gran parte por las emisiones de carbono generadas por los edificios, existe un movimiento creciente para ecologizar los edificios existentes y exigir normas y prácticas de construcción más ecológicas para los nuevos edificios industriales, siendo el uso inteligente de la energía y la reducción del consumo una de las principales preocupaciones.
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Un ejemplo notable de arquitectura industrial vanguardista del siglo XXI es CopenHill, en Copenhague (Dinamarca), que se autoproclama «la central eléctrica de conversión de residuos en energía más limpia del mundo». Concebida como un espacio público, incluye una fachada construida para escalar, un tejado por el que se puede caminar y una pista de esquí real.
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Datos interesantes sobre la arquitectura industrial
La arquitectura y el diseño de interiores de estilo industrial se han puesto de moda en los últimos años a medida que los almacenes abandonados del mundo se convierten en modernos y caros lofts, espacios de oficinas, cafeterías, restaurantes y hoteles. Hoy en día no hace falta mirar muy lejos para ver la influencia de la arquitectura y el diseño industriales incluso en los entornos menos industriales, con el uso cada vez más generalizado de materiales en bruto, elementos de construcción expuestos y otras señas de identidad del estilo, y no reservado simplemente a las conversiones de lofts urbanos.
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Considerada una obra maestra de la arquitectura industrial, la fábrica de automóviles Ford Assembly Building de 1931 en Richmond, California, fue diseñada por el renombrado arquitecto industrial Albert Kahn. Fue incluida en el Registro Nacional de Lugares Históricos en 1988, pero los daños causados por un terremoto al año siguiente pusieron en peligro su futuro antes de que fuera rehabilitada con éxito para convertirla en un espacio de oficinas y centro cultural de uso mixto que funciona con energía solar.
La arquitectura de estilo industrial formó los cimientos de la arquitectura moderna.
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¿Cuál es la diferencia entre arquitectura moderna y arquitectura industrial?
La principal diferencia entre la arquitectura moderna y la industrial es que la arquitectura moderna busca la simplicidad, mientras que la arquitectura industrial se centra más en la función.
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¿Qué hace que un edificio sea industrial?
Un edificio es industrial cuando se utiliza para la producción o el almacenamiento de mercancías. Esto incluye cosas como fábricas, cervecerías, refinerías y muchas otras estructuras utilitarias hechas a medida.
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¿Cuáles son los materiales utilizados en la arquitectura industrial?
Los materiales más utilizados en la arquitectura industrial son el hormigón, el hierro, la madera, la piedra, el acero y el ladrillo.